Cada 19 de septiembre, la Iglesia recuerda la figura de San Alonso de Orozco, religioso agustino que vivió en el S.XVI. Fue muy conocido en su época por sus dotes de predicador, así como por su intensa actividad caritativa. Actualmente, apostolados agustinos como la Escuela Infantil San Alonso de Orozco, de Madrid, llevan su nombre.
San Alonso de Orozco nace 17 de octubre de 1500 en Oropesa (Toledo), y muere el 19 de septiembre de 1591. Casi un siglo de vida en pleno vigor de la Corte de Felipe II, la más grande y prestigiosa de la época.
Procedente de familia noble, se traslada a estudiar a la Universidad de Salamanca. Seguramente, influido por la predicación de Santo Tomás de Villanueva, Prior del convento agustino de Salamanca, entra en el noviciado agustiniano. Le acompaña su hermano Francisco el 8 de junio de 1522, siendo el maestro de novicios el venerable Luis de Montoya.
Emite los votos en la Orden de San Agustín y, posteriormente, accede al orden sacerdotal. Fiel en el amor a Dios sigue a Cristo crucificado y, como el Buen Pastor es afectuoso y humilde en el amor a los semejantes.
Un agustino en la corte
Es famoso por su predicación por lo que, siendo Prior del convento de Valladolid, el emperador Carlos V le nombra Predicador Real. Cargo confirmado también por su hijo Felipe II. La familia real y los cortesanos buscan el consejo y consuelo de Alonso, a quien tienen en gran estima. Sin embargo, él prefiere la compañía de enfermos y necesitados, en los que ve la imagen de Cristo crucificado. Y, en la atención a los niños pobres de Madrid, contempla la imagen del niño Jesús.
Sin dejar de desempeñar las tareas de predicador y de gobierno dentro de la Orden, tiene tiempo de estudiar y escribir. Deja una extensa producción espiritual orientada a la formación de los fieles en sus diferentes estados y condiciones de vida, con el objetivo de acercarlos al amor de Dios. Es un precursor de la llamada universal a la santidad, declarada siglos después por el Concilio Vaticano II.
Espiritualidad
Su espiritualidad, arraigada en San Agustín, insiste en la interioridad como fundamento del conocimiento de sí y de la continua búsqueda de Dios. Es fiel defensor de la eucaristía y comunión diarias, en un tiempo cuya practica no era ordinaria. En ella descubre el amor de Dios hacia el ser humano.
Contemplativo en acción, decían de él que “nunca entraba en oración, porque nunca salía de ella”. Enseñaba cómo mantener continuamente en su memoria la presencia de Dios por medio de breves oraciones como “dardos de amor”.
Para San Alonso de Orozco la vida contemplativa era más perfecta que la activa. Ahora bien, también consideraba a ésta última más importante en orden a la salvación, porque “seremos juzgados por las obras de amor”.
Aunque San Alonso siempre defendió en sus escritos la primacía del amor sobre la ciencia, sus textos muestran gran erudición. De hecho, se le considera uno de los autores espirituales más leído del s. XVI. Algunas de sus obras tuvieron tres ediciones durante la vida del Santo y se tradujeron al italiano y, después de su muerte, a otros idiomas europeos.
San Alonso desafía a la Inquisición y es un gran defensor de la utilización de la lengua castellana para escribir sobre Teología y espiritualidad. Con ellos pretende que se favorezca la formación del pueblo.
Otra lección que deja este gran santo para nuestro mundo materialista es el amor a la Madre de Dios, por cuya inspiración comienza a escribir. Nadie como el que nació para «Capellán de la Virgen» pudo decir cosas tan hermosas sobre María.
Escuela Infantil San Alonso de Orozco
Como cada 19 de septiembre, el Monasterio de las Madres Agustinas, de Madrid, vive una jornada de fiesta especial, con ocasión del día de San Alonso de Orozco, el santo titular y fundador de la comunidad.
Allí reposan los restos de este santo agustino que vivió en el S. XVI y que fue conocido por su espiritualidad contemplativa, su amor a la Eucaristía y sus escritos. Sus obras, en castellano y en latín, han sido reeditadas y traducidas a distintas lenguas.
Esta tarde, como cada año, las religiosas celebrarán la Eucaristía en la Iglesia del Monasterio, que presidirá a las 19:00 horas, el P. Domingo Amigo OSA, Prior Provincial de la Provincia de San Juan de Sahagún. En la misma participarán las familias y los niños que son alumnos de la Escuela Infantil San Alonso de Orozco.